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La que con tesón y más amor propio; con inteligencia y más humildad; la hija de sus padres y la hermana de su hermano; la amiga de sus amigos y la preferida de sus profesores; la que jugando al ajedrez gana y gana y, cuando a veces pierde, siempre se enfada consigo misma, no con el otro; la que no dice palabra más alta que otra y no maldice de rivales (Rivales que lo son siempre sobre el tablero, porque en la vida no puede tenerlos)
Es ella: La apasionada del ajedrez; la que lloraba de niña porque no llegaba a ver los altos emparejamientos; la que me cogía de la mano solicitando, cariñosamente, mi apoyo moral; la que aprendía y aprende partida tras partida; la que con orgullo, el suyo y el de sus padres… y el de su hermano, y el de sus numerosos amigos, entre los que tengo el placer de considerarme; la que huye de la prepotencia…
Es ella. Es ella. La que es capaz de ganar (y lo hace casi siempre) y no subir al cielo; la que he tenido la suerte de ver crecer de niña a adolescente, rodeada siempre de buena gente; la que, por no llegar, no llegaba al tablero y ya quería ser el primero. Si: el primero, porque para ella no había sexo: todos son amigos a los que intentar vencer sin menosprecio.
Es ella: Raquel Gómez González, la que logra un nuevo éxito: Ayer ascendió a Primera y hoy, Raquel, me dejas que te de un beso.
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Hombre, lo suyo es que hubieras elegido un título distinto al de Mariela, pero bueno.
ResponderEliminar¿Qué decir sobre esta niña? A pesar de que se muestre algo fría a veces, es muy simpática. ¡Y cómo juega! Siempre es difícil ganarle y más en finales. Todavía recuerdo hará 4 ó 5 años, en el Open de Isla Cristina, donde me ganó fácil.
Además, ella y su familia siempre se han caracterizado por su humildad. Incluso tras convertirse Raquel en una de las mejores de Andalucía, han seguido dándole más importancia a sus estudios que al ajedrez.
Por eso, merecía una mención por mi parte. Sin duda son de las mejores personas que he conocido en todo el tiempo que llevo jugando al ajedrez.
Seguro que todavía nos quedan mil cosas por vivir juntos. Un abrazo a todos, nos veremos en Islantilla dentro de poco.
Gracias Leonardo y a ti ikaro por las cosas tan bonitas que decis de mi hija, gracias por ayudarme en demostrar que el ajedrez a parte de un juego tambien tiene contacto con gente que merece la pena conocer
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